La fotografía difundida por Progreso en Verde fue registrada en la calle Corderia, en pleno centro histórico de Palma, que es, precisamente, una de las rutas más transitadas en los recorridos turísticos que efectúan las calesas con tracción animal.
Según la entidad que lidera Guillem Amengual, la práctica de aceptar más pasajeros de la cifra permitida en una calesa es una de las "infracciones más repetidas" por los conductores. El límite autorizado por la ordenanza municipal es de seis personas.
Progreso en Verde ha lamentado que, a pesar de las promesas del Ayuntamiento de Palma, y "de los titulares y portadas de los periódicos y las promesas electorales, los equinos siguen sufriendo la explotación y el maltrato a diario en nuestras calles".
AMENAZAS DE MUERTE
Por otra parte, la organización animalista ha informado de que el conductor de una calesa de Palma ha sido denunciado por amenazas de muerte a una ciudadana que le recriminó que el vehículo, tirado por un caballo, siguiera circulando a pesar de que en ese momento permanecía activada la alerta por altas temperaturas.
Progreso en Verde ha exigido nuevamente al Gobierno que apruebe un proyecto de ley para "poner fin a la tracción a sangre en todo el país".
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