Las lesiones causadas a una niña de 8 años por parte de otros alumnos que la agredieron salvajemente en el patio del colegio, en el barrio de Son Roca de Palma, ha causado una considerable conmoción entre la sociedad e incluso el caso ha tenido amplia repercusión en los medios de comunicación de ámbito nacional. La Unidad de la Familia del Cuerpo Nacional de Policía, junto a la Fiscalía de Menores, llevan a cabo la investigación para esclarecer los hechos y tras la incoación de las correspondientes diligencias, determinar la edad de los participantes en la paliza. Solo tras esto se podrá adjudicar presuntas responsabilidades penales, pues como les informa mallorcadiario.com seis menores que ya han sido identificados tiene menos de 14 años, por lo que sus actos no pueden ser perseguidos por la vía penal y la actuación que eventualmente se lleve a cabo habrá que circunscribirla en el ámbito social y si acaso en la responsabilidad civil de los padres de los autores de la agresión o también en la responsabilidad del centro educativo por un hecho delictivo que tuvo lugar en sus instalaciones.
En todo caso, hay que dejar que las instituciones hagan su trabajo y que investiguen las circunstancias del hecho sin presiones de ningún tipo. Al respecto llama la atención que desde el ministerio del Interior se descarte el bulling o acoso escolar cuando los familiares de la víctima apuntan a lo contrario. Y también es muy triste comprobar cómo hay algunas organizaciones que pretenden arrimar el ascua a su sardina y no pierden comba a la hora de exigir la dimisión de todo el equipo directivo del colegio, sin conocer los detalles ni las conclusiones del informe que la inspección educativa está elaborando sobre lo sucedido, como ya anunció el Govern. Son entidades en absoluto representativas que se significan por cargar contra los docentes a la mínima oportunidad. Pero un caso de tanta gravedad y trascendencia no puede ser tratado con frivolidad, sino que ha de abordarse con escrupuloso respeto a la legalidad y con profesionalidad máxima. Dejemos trabajar a las instituciones antes de sacar conclusiones precipitadas.