El presidente del Govern, José Ramón Bauzá, y la jefa de la oposición, Francina Armengol, se han responsabilizado hoy mutuamente de que a lo largo de la legislatura los dos principales partidos de las islas no hayan llegado a ningún acuerdo sobre los principales problemas de la ciudadanía.
Los líderes del PP y el PSIB se han culpado de la falta de pactos para la mejora de la educación, para combatir el desempleo y sobre la mejora de la financiación y las inversiones estatales en el archipiélago.
"Llegar a acuerdos implica la participación activa de las dos partes", ha asegurado Bauzá en respuesta a una pregunta sobre "pactos de estado" planteada en el pleno del Parlament por Armengol, sobre cuya participación en las primarias del PSIB ha ironizado.
El presidente ha recalcado que la portavoz socialista debería "analizar su cuota de responsabilidad" en la falta de acuerdos, porque ha tenido "muchas oportunidades" y las ha desechado.
Según Bauzá, el PSIB ha bloqueado la posibilidad de alcanzar un pacto en materia educativa porque se aferra a la "inmersión lingüística", ha votado en contra de todos los presupuestos del PP, han rechazado la Ley del Suelo e incluso han anunciado su oposición a una Ley Agraria que ni siquiera se ha hecho pública.
"Para llegar a acuerdos es necesario no decir que no a todo", ha incidido el presidente, que ha sugerido que un cambio de actitud puede hacer a Armengol "ganar las primarias" a Aina Calvo.
La líder del PSIB ha acusado a Bauzá de mentir cuando anunció que buscaría alcanzar acuerdos sobre los grandes problemas de la comunidad cuando fue investido, ya que después "ha encarnado un Govern de una radicalidad ideológica extrema".
"Ha gobernado desde la prepotencia y la falta absoluta de diálogo y de consensos. Le quedan menos de 500 días, puede rectificar o seguir por el mal camino", ha afirmado Armengol.
Concretamente le ha propuesto que se siente a negociar con la comunidad educativa para superar el conflicto de cara al próximo curso, que dote de recursos un plan de choque contra el paro que debía estar aprobado hace tiempo y que pacte con la oposición una postura común frente al Gobierno central para negociar una mejora de la financiación, las inversiones estatutarias y el nuevo REB.