Los ciudadanos de Balears aportaron con sus impuestos a la Unión Europea (UE) en 2011 un total de
308,8 millones de euros y recibieron en inversiones europeas en el archipiélago
28 millones, por lo que el saldo fiscal negativo se situó en 280,8 millones de euros.
Son datos oficiales de la
Comisión Europea y de los gobiernos español, británico y belga recogidos en un estudio realizado por la Fundació Emili Darder, vinculada al Partit Socialista de Mallorca (PSM), y el Centre Maurits Coppieters (CMC), que reúne a los partidos nacionalistas de la UE.
Según estas cifras, Balears se situó en el tercer peor puesto de la UE del saldo fiscal respecto al Producto Interior Bruto (PIB) con un -1,08 %, sólo por detrás de la región de Bruselas (-1,62 %) y Valonia (-1,49 %). A Baleares le siguen Flandes, Madrid, Cataluña, País Vasco y Navarra.
El economista Jaume Garau y el secretario general del PSM, Biel Barceló, han criticado en rueda de prensa la "falta de transparencia" del Gobierno a la hora de repartir las inversiones de la UE en España y han exigido al PP y al PSOE, los dos partidos que suelen estar al frente del gobierno del Estado, que "reviertan esta injusta situación".
Como ejemplo, Garau ha advertido de que Aragón, una comunidad con la población de Baleares y sin las dificultades de la insularidad, recibió en 2011 cuatro veces más de dinero en inversiones de la UE que la Comunidad balear.
En opinión de Barceló, el "problema" es que el Gobierno no defiende a Baleares ante la UE como sí hace con otras regiones insulares como Canarias o las ciudades de Ceuta y Melilla, que disponen de ventajas fiscales mucho mayores que el archipiélago balear.