Los hechos se remontan a finales de octubre del año pasado, cuando los dos hombres acudieron a una sala de juegos del centro de Mahón, donde jugaron varias partidas aparentemente normales, con las que llegaron a acumular premios por valor de 33.000 euros, ha informado la Jefatura de Baleares en un comunicado. Llegaron a cobrar cerca de 25.000 de forma escalonada a lo largo de la madrugada.
Ante las sospechas del personal de la sala, que dio aviso a un responsable, descubrieron que podía deberse a un fallo en la máquina que otorgó los premios, sobre el que se habría alertado previamente, pero, por error, el aparato no había sido desconectado.
Durante la investigación, los agentes han recopilado y analizado las evidencias aportadas por las empresas implicadas.
Los agentes han acreditado uno de los implicados, trabajador de otra sala de juegos, conocía previamente el error que se iba a producir y, al observar que la maquina no se había desconectado, y con el fin de no despertar sospechas, supuestamente se habría concertado con un segundo hombre para que éste realizara las apuestas y obtuviera los premios.
Los presuntos autores, uno de ellos con antecedentes policiales, fueron detenidos el viernes y han quedado en libertad, a la espera de ser requeridos por la autoridad judicial.
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