El acto de toma de posesión de
Francina Armengol como nueva presidenta del Govern fue incontestablemente multitudinario. El patio del Consolat estaba a rebosar y no corría ni una gota de aire. al contrario, entre las altas temperaturas y la sensación de bochorno, el acto se hizo difícil de soportar.
Unas 500 personas asistieron a la toma de posesión y dos de ellas sucumbieron al sofoco del calor sufriendo desmayos.
Fueron dos mujeres.
Una de ellas -la que muestra la imagen siendo evacuada en camilla- no ha sido identificada. La otra sí es un personaje conocido. Se trata de
Pilar Carbonell, la que fuera presidenta de CAEB Restauració, que tuvo que ser atendida por un mareo causado por el calor.