Según ha indicado Dalmau, la actual ordenanza marca la limitación en las líneas urbanas a 40 km/h. "Empezamos así un camino como Barcelona, Londres o Valencia para conseguir una ciudad más segura y más equitativa en la ocupación del espacio público", ha explicado.
El concejal ha señalado no hay diferencias entre la emergencia climática y la sanitaria en cuanto a la ruta a seguir en materia de movilidad. En este sentido, ha apuntado que se trata de recuperar el espacio para los peatones, quitar protagonismo al coche y continuar trazando la red ciclista.
PROTEGER 60 HECTÁREAS DE SON GUAL
Asimismo, el pleno del Ayuntamiento de Palma también ha aprobado la modificación del plan general para proteger 60 hectáreas de Son Gual, según ha explicado la concejala de Modelo de Ciudad, Vivienda Digna y Sostenibilidad, Neus Truyol. "Este ámbito tiene un gran valor natural y de esta forma hacemos de Palma una ciudad más sostenible y más respetuosa con el medio ambiente", ha asegurado.
"Hemos de ser conscientes de que tenemos dos emergencias delante: la climática y la sanitaria, las dos que tienen relación entre ellas. Está demostrado que respetar la biodiversidad y los medios naturales nos puede hacer más fuertes para hacer frente a futuras pandemias", ha indicado la concejala.
En este sentido, ha indicado que esta es "una medida de decrecimiento urbanístico" y ha señalado que desde Cort quieren que Palma sea una ciudad "que dé salida a sus necesidades de vivienda y servicios pero que lo haga sin ocupar más territorio".