El que fuera jefe de Inversions per a la Millora de l’Entorn Turístic (IMET) Antoni Rebassa ha ingresado en la cárcel de Palma en la tarde de este miércoles para cumplir una condena de 4 años y medio de prisión por el caso Arbona dentro de la causa matriz Voltor.
La condena a Rebassa impuesta por la sección segunda de la Audiencia Provincial de Palma y ratificada por el Tribunal Supremo se refiere a dos facturas de 12.000 y 3.000 euros a beneficio del exalcalde de Sóller
Antoni Arbona para la realización de unos trabajos relativos a unas rutas de senderismo por la Serra de Tramuntana que, según Arbona y previo pacto con la Fiscalía Anticorrupción, no se realizaron.
Rebassa deberá cumplir la condena a pesar que ningún acusado ni testigo apuntó hacia él. De hecho, el condenado 'arrepentido'
Antoni Oliver afirmó en relación a una de las facturas que la validó directamente él sin que pasara por las manos de Rebassa. Esta declaración, que fue puesta de relieve por el abogado Miquel Arbona en su recurso de casación, fue desoída por el Supremo puesto que en su sentencia no le dedicó ni una sola palabra. De haberse atendido,
se hubiera roto la malversación continuada que elevaba la pena hasta los 4 años y medio.
Además, en la sentencia redactada por Diego Gómez-Reino, y en relación a las facturas de Arbona, se argumenta que “no intervino en su pago, ni dio la orden para que fuera elaborada” pero que debía “de haber propuesto que no fuera satisfecha”.
A pesar de no haber sido reconocido ni autor ni inductor de ningún delito, los tribunales han impuesto a Rebassa la
pena más elevada de este caso.