LA HISTORIA
Entre cartas marcadas y sueños imposibles narra la historia de Carlota, una joven treintañera que vende ropa interior en una franquicia y que sueña con una vida mejor, más cómoda y que no le cueste ningún esfuerzo conseguir, engancha desde el primer capítulo con su prosa ágil, desprovista de artificios, repleta de imágenes y salpicada de referencias cinematográficas y toques de humor que nos arrancan sonrisas cuando menos lo esperamos. Los capítulos son cortos, lo que facilita la lectura y el avance de la trama y nos mantiene pegados a las palabras queriendo empezar el siguiente capítulo cada vez que nos encontramos al final de alguno.
La vida mejor con que sueña Carlota llega de manera inesperada cuando su psicóloga le invita a escribir sus pensamientos y a visitar a su madre, con la que hace años que no se habla. Encuentra un viejo cuaderno en un cajón e inicia sus deberes psicológicos. Incapaz de enfrentarse a su madre, escribe un reencuentro imposible que se hace realidad. En breve, cambia su minúsculo piso por una casa con vistas al mar con la que su madre, sin saberlo Carlota, apuesta en clandestinas partidas de póquer. Liquida la hipoteca, deja su trabajo y se entrega a la vida ociosa. Y, como prueba definitiva de que el cuaderno en el que escribe es mágico, se inventa un jardinero de cuerpo perfecto para deleitarse cuando mire hacia el jardín.
Sin embargo, su madre pierde la casa en una partida de cartas y, poco después, desaparece. Cuando Carlota decide deshacer el desaguisado con cuatro líneas en el cuaderno, descubre con espanto que también ha desaparecido.
Las pocas pistas que tiene la llevan a Las Vegas, donde, al parecer, un grupo de mafiosos pretende arruinar los casinos con las habilidades de la madre de Carlota con las cartas. Acompañan a Carlota en sus aventuras un grupo de pintorescos personajes: su mejor amiga y escudera, Ramona; su vecino, un futbolista retirado al que le gustaría hacer algo interesante con lo que le queda de vida y el único que puede costear el viaje en busca de la madre de Carlota; el jardinero, que aspira a lo mismo que Carlota, es decir, a una vida de lujos y placeres; y la asistenta de su madre, la última persona que la vio con vida y que esconde también alguna sorpresa. Con pocos medios, sin apenas pistas y sin apenas conocer el idioma, el grupo de amigos se lanza a recorrer los casinos de
Las Vegas con la esperanza de encontrar a los mafiosos que tienen secuestrada a la mujer.
Pero Carlota no es la única que busca a su madre. Por el camino, se topan con un inspector de Hacienda decidido a atrapar a la madre de Carlota porque está convencido de que defrauda al Fisco, y una agente del FBI en horas bajas que persigue a la mafia en una misión con pocos fondos y con la que pretende redimir su nombre en la Agencia.
Así, con todos estos ingredientes, entre Palma y Las Vegas, la autora teje una novela de acción que no se puede dejar de leer, con giros inesperados y un final sorprendente.
LA AUTORA
Ángeles Bellinfante vive en palma, ciudad en la que nació, creció, estudio derecho, contabilidad, algunos idiomas para poder viajar sin perderse.
Empezó a escribir muy joven, por imitar a sus autores favoritos, por pura diversión, porque las redacciones del colegio le sabían a poco y para dar salida a su imaginación, desbordada con historias. Siempre fue más fácil inventarse las vidas, ajenas y hasta la propia, que los retazos de realidad que iba pillando por aquí y por allá, vidas que está segura que existen en algún universo paralelo.
Y, cuando la palabra no alcanza, lo hace el dibujo, el color, como demuestra con la portada elegida para su primer libro.
Entre cartas marcadas y sueños imposibles es su primera incursión en el mundo de la edición, para la que se ha rodeado de profesionales que le han asistido a crear un libro cuidado y atractivo no ya desde la primera página, sino desde la mismísima portada, que da muestra de sus habilidades pictóricas con la imagen de una mujer que nos atrapa con su mirada y nos invita, o desafía, a entrar en su mundo.