Observando con calma y 'a toro pasado' algunas actitudes y cosas que se han dicho y otras que han pasado, a uno le entra la sensación de que Podemos ha venido aquí a castigar a todo el mundo. Todos hemos sido malos, hemos sido y somos el Demonio y Podemos ha caído del Cielo para redimirnos. Todos somos malos de matar menos ellos. En la política balear ya hemos tenido algunos ejemplos.
Podem no entra en el govern del Pacte porque el PSIB es un partido que para ellos huele mal, huele a 'Casta', un término que ahora que tocan moqueta ya no utilizan. Es un castigo.
A los de Més los sacan de sus casillas permanentemente porque hay que castigarlos ya que ocupan el mismo espacio político. Pregunten en Eivissa. La 'ecotasa' y su negociación-imposición ha dado muchas muestras de esa actitud.
Del PP ya casi ni hablamos. Ellos han nacido para castigar al PP, para sacarlo de las instituciones. Aunque aquí aparecen algunas lagunas. Al PP se le puede utilizar en el Parlament para castigar a socialistas y econacionalistas. Juego de mayorías al servicio de Alberto Jarabo.
PSIB y Més no son amiguitos de los hoteleros, pero el azote es Jarabo y su corte. Esta semana, la presidenta de los hoteleros mallorquines denunciaba que la ecotasa era un castigo al sector hotelero. Evidentemente, hay disgusto hotelero con todos los partidos del Govern, pero los que más atacan, acusan y señalan con sus declaraciones son los de Podem (en eso, es verdad que a veces se suma el casipodemita David Abril).
Pero Jarabo también utiliza el castigo en otros ámbitos. Sí, me olvidaba de uno. Paseando una amplia sonrisa y siempre con la mano por delante para estrecharla con la de quien se cruce, Alberto Jarabo ha tardado muy poco en marcar la línea divisoria entre medios amigos y medios enemigos a los que hay que castigar ninguneándoles. Él sabrá.
Por lo visto, esto de castigar lo han aprendido en Madrid, donde Pablo Iglesias ha sacado el látigo esta semana. Recuerden que Monedero ya hace tiempo que se fue y que ahora Errejón vive momentos de debilidad en el ¿partido?. Cuidado que a Jarabo le dé un día por copiar también eso y le empieza a coger manía a su inseparable por ahora Laura Camargo. No se ven fisuras. Esperemos.
