Las muertes se han ocasionado a causa de las terribles inundaciones y los deslizamientos de tierra, según ha informado Muhammad Aidi, portavoz del Ejército de Papúa.
Todavía hay unas 75 personas desaparecidas y el número de desplazados supera los 8,500.
Cabe destacar que el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, lamentado la pérdida de vidas y la destrucción de propiedades.