Los hechos tuvieron lugar el pasado 28 de octubre a la salida de una discoteca de Palma.
Según el escrito de acusación, el agresor manoseó primero a la mujer en el interior de la discoteca y esta logró zafarse. El joven fue entonces expulsado del interior del local pero cuando la agredida y su pareja salieron del recinto, el agresor se acercó de nuevo a ellos esgrimiendo un cuchillo para robarles por lo que se dirigieron a un cajero automático ya que no llevaban dinero encima.
De nuevo bajo la amenaza del cuchillo, siguiendo el relato de la Fiscalía, el encausado volvió a manosear las nalgas de la víctima, mientras esta pedía ayuda.
En ese momento, una persona que trató de mediar también fue objeto de las amenazas con el cuchillo.
A la llegada de la policía, el individuo también se resistió con fuerza y amenazó a uno de los agentes con degollarle.
El Fiscal pide para el hombre un año y seis meses de cárcel por agresión sexual, dos años y dos meses por tentativa de robo, otros dos años y cuatro meses por la agresión sexual amenazando con el cuchillo, un año por amenazas y seis meses por resistencia a la autoridad.