www.mallorcadiario.com

Advertencia, decir la verdad no es bueno para la salud

Por Juan Antonio Tormo
lunes 13 de julio de 2020, 03:00h

Escucha la noticia

Simón lo ha tenido claro desde el principio, es evidente que ha visto la película de Rob Reiner interpretada por un sobresaliente Jack Nicholson y Tom Cruise “Algunos hombres buenos” y su escena favorita es esta “tú no puedes encajar la verdad, vivimos en un mundo que tiene muros y esos muros están vigilados por hombres armados. Yo tengo una responsabilidad mayor de la que tú jamás podrás imaginar” pero en esta ocasión Jack Nicholson es Simón y Tom Cruise somos todos nosotros.

El Ministerio de Sanidad y el Gobierno según parece cree que no podemos encajar el número de muertos que ha habido, tampoco debemos saber porque las mascarillas no eran necesarias y ahora sí, porque se nos confinó a todos sin ningún plan para lo que ha venido ahora, que es el caos económico, porque algunas Comunidades se pasan por el forro dar los datos cada día, porque se puede ir en un autobús abarrotado o en un metro y sin embargo en un cine, teatro o en un bar o terraza tiene que haber un aforo máximo, porque se dice que nadie lo vió venir cuando hay numerosos informes de antes del confinamiento, porque se dice que saldremos más fuertes cuando no hay vacuna y nuestra economía es la más dañada de la zona euro.

Pongamos “redoble de tambores” la conclusión puede ser que los españoles somos débiles, zoquetes y si me apuran un poco hasta medio gilipollas y por eso no se nos puede decir la verdad, porque “pa qué” nos van a contar la verdad si no la entendemos, mejor así.

SI volvemos a la película (esta es antes de la basura que estamos viendo por Netflix y compañía) Tom Cruise le hace una pregunta clara a Jack Nicholson antes de que soltara la frasecita descrita antes “¿ordenó usted el código rojo?” esta me parece una buena pregunta y la replanteamos ¿quién ha ordenado o planeado esta estrategia de no contar la verdad, de esconder datos, de dejar pasar el tiempo? A falta de Nicholson para endosarle el marrón, deberemos apuntar muy arriba en el escalafón de la administración, pero no nos engañemos esto no es como las películas norteamericanas en dónde se puede tratar cualquier tema por mucho que le joda al inquilino de turno de la Casa Blanca, aquí no se hacen películas molestas (uno todavía está esperando una película sobre la muerte de Miguel Ángel Blanco, el atentado de Hipercor o de la Casa Cuartel de Zaragoza o del más largo secuestro de la historia, el de Ortega Lara o el incendio del Windsor).

No podemos admitir como una realidad que se nos pueda mentir y ocultar informaciones tan importantes desde el Estado y más cuando hay tantos muertos y tanta gente descorazonada con su futuro, decir la verdad en el ámbito privado puede ser una cuestión de ética, de moral, de no afrontar la realidad, pero en cualquier caso es sólo responsabilidad nuestra, pero cuando es el Estado el que procede de esta manera sólo cabe una solución, pedir responsabilidades, aunque otra cosa será que las asuman.

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (0)    No(0)

+
0 comentarios