El ganador del Joan Benejam se llevará un primer premio de hasta 2.000 euros, el segundo clasificado 250 euros y el tercero un accésit honorífico. Los tres primeros clasificados se llevarán una “carota” de Joan Benejam pintada por el artista José Marqués Torrent, nieto del pintor Torrent. En palabras de Pons, “este impulso para el Premio Joan Benejam y la literatura en menorquín es posible gracias al apoyo empresarial y ciudadano. Sa Fundació ya roza los 150 socios en la isla y supera los 600 en Baleares. La sociedad civil menorquina se está movilizando para frenar la degradación de su lengua menorquina”.
El vicepresidente ha reivindicado la tradición literaria en menorquín que vivió su plenitud a caballo entre los siglos XVIII y XX, y ha recordado a figuras tan descatadas para la narrativa costumbrista en menorquín como Joan Benejam i Vives, autor de Foc i Fum, Ciutadella Veia… a quién van dirigidos los premios, Àngel Ruiz i Pablo, Antoni Febrer i Cardona o Joan Ramis i Ramis. “—Históricamente, el menorquín sí ha tenido tradición literaria, tradición que empezó a recular a partir de la normativización fabriana de 1913”, ha recalcado Pons. Una tradición literaria que Sa Fundació ha conseguido resucitar estos últimos años con la organización de los Premios Joan Benejam en menorquín. Por otro lado, Pons ha lamentado que un año más, ni el Consell insular ni el Govern balear hayan destinado ni 1€ del erario público balear a iniciativas para promocionar el menorquín y las modalidades lingüísticas insulares recogidas en el artículo 35 del Estatuto de Autonomía.
Finalmente, Pons ha reivindicado el trabajo de Sa Fundació a lo largo de estos seis años en Menorca, y ha reivindicado los Premios Joan Benejam como ejemplo de normalización lingüística ante la preocupante bajada de hablantes de la lengua autóctona en Baleares del 45% al 36%. En palabras del director de Sa Fundació, “es el resultado del fracaso de la Ley de Normalización Lingüística y evidencia una vez más la resistencia pasiva de muchos menorquines ante el catalán estándar, un modelo de lengua de raíz barcelonesa vinculado a la imposición lingüística y al nacionalismo”. Ha añadido “el problema no es si el menorquín o el catalán forman parte del mismo idioma o no —hecho que Sa Fundació nunca ha cuestionado— sino que la salud de nuestra lengua es cada vez peor”.
Pons Torres ha finalizado afirmando que “tendemos la mano y pedimos al Govern balear, Consell insular y Ayuntamientos su implicación con los Premios Joan Benejam con el fin de frenar la sangría de hablantes de menorquín”. Y ha finalizado “nuestras autoridades no entienden que, para que los ciudadanos de Baleares utilicen, quieran y defiendan su lengua, primero deberán sentirla como propia. El Premio Joan Benejam supone una oportunidad para impulsar, dignificar nuestra lengua y conseguir que los ciudadanos la sientan como propia”.
Adjuntamos fotografías de la convocatoria. Las bases podrán consultarse en la web www.safundacio.es a partir del 17 de enero, festividad de Sant Antoni, Patrón y Día de Menorca.