inundaciones Llevant

El presidente del PP de Mallorca y candidato al Consell, Llorenç Galmés, se ha comprometido a arreglar "de una vez por todas" los puntos negros de la torrentada de Sant Llorenç "tras cuatro años de un PSOE inoperativo".

El director general de Emergències i Interior, Jaume Barceló, ha presentado este lunes a los alcaldes de Llevant las herramientas de predicción de fenómenos meteorológicos, en concreto un total de 32 nuevas estaciones hidrométricas que estarán en funcionamiento a finales de año y permitirán ganar en capacidad de reacción para evacuar a la población en caso de inundaciones.

Dos años después de la tragedia de Sant Llorenç, los protocolos de actuación en caso de inundación -denominado Plan Inunbal- sigue sin actualizarse. El PP y El PI piden responsabilidades al Govern y éste, según fuentes de la conselleria, afirma que tienen un borrador encima de la mesa que se está ultimando.

Autoridades políticas y vecinos han recordado este miércoles la tragedia que supuso hace un año la torrentada de Sant Llorenç des Cardassar de Mallorca y han homenajeado a las 13 personas que perdieron la vida por las fuertes lluvias.

El Consell de Mallorca ya ha solicitado formalmente al Gobierno de España las ayudas por los daños de las inundaciones de octubre de 2018 en el Llevant, cuyas obras de emergencia tuvieron un coste total de más de 23,4 millones de euros, de los que la subvención estatal cubrirá un 50 por ciento (11,7 millones).

9 de octubre de 2018, una fecha que a Sant Llorenç des Cardassar no se le va a olvidar nunca. Las intensas lluvias que desbordaron el torrente dejaron un resultado de 13 muertos, numerosos heridos y cuantiosos daños materiales. Fue la peor catástrofe natural sufrida en Mallorca en décadas. Transcurrido casi un año del trágico suceso, Mateu Puigrós, alcalde de Sant Llorenç, hace balance de la situación actual y reclama las ayudas estatales que todavía no han recibido.

El Consejo de Ministros ha aprobado este viernes un crédito extraordinario de 20,1 millones para reparar las infraestructuras públicas afectadas por las inundaciones en el Llevant de Mallorca, previsto en el Real Decreto Ley de medidas extraordinarias que aprobó en enero.