Ni migajas para la izquierda en IB3

Hoy ya nadie se llama a engaño: en IB3, el gobierno de turno hará lo que quiera, pondrá y nombrará, gastará como quiera y todo sin control real. Lo que ocurre con lo que está montando el PP es que se le ha ido un poco la mano: no cuida ni las formas, no ha buscado ni siquiera a un títere que mantenga las apariencias, que cumpla con alguno de los requisitos que indica la Ley. Y, peor aún, han dado donde duelen: la tradición dice que se ponen algunos de la derecha -la mayoría- y otros de la izquierda, la minoría, todos se reparten el pastel y tan contentos.

Ustedes verán: la izquierda perdonaría que controlen IB3 -¿qué podría hacer, si encima votó la ley que permite este desastre?-, pero que no haya ni una nómina para ellos del erario de IB3, es demasiado. ¿Dónde vamos a parar, si el rodillo conservador va a aplastar el derecho a comer caliente de los demás? Así que, ahora, fuera de todo el pastel, a muerte. Y, la verdad, la estrategia del Govern es tan pobre que se lo merecen.