Los hechos ocurrieron sobre las 6:30 horas en la Plaza de España de Palma, cuando una mujer, que se identificó como Policía Nacional, alertó a unos agentes de la Policía Local de que había un hombre que se comportaba de forma sospechosa y parecía molestar a los viandantes.
Los agentes dieron con un individuo que coincidía con la descripción proporcionada y al acercarse, comprobaron que discutía con un taxista aunque también se percataron de que tenía un corte en el rostro y restos de sangre seca.
Cuando los agentes se aproximaron, el individuo mostró una actitud hostil desde el primer momento y amenazó con un “si os cojo de uno en uno os reviento la cabeza”, negándose a identificarse y resistiendose a los policías, por lo que fue detenido.
Al ser registrado, los agentes le intervinieron un revólver con tres vainas detonadoras y se decidió su trasladao a un centro médico para que fuera atendido.
Durante el traslado, y según refiere la Policía Local, el detenido se mostró muy agresivo y llegó incluso a amenazar al personal médico que lo atendió.
Finalmente, y tras las diligencias iniciales necesarias, fue puesto a disposición judicial y quedó en libertad con cargos.