Los hechos ocurrieron el pasado miércoles, día de Navidad, por la noche, sobre las 23:25 horas. Agentes de la Policía Local de Palma estaban patrullando por la zona de Avenidas cuando observaron a un coche que iba haciendo zig-zag, invadiendo los carriles laterales.
Por ello, intentaron hacer parar a la conductora usando las señales luminosas. Sin embargo, la conductora hizo caso omiso y siguió la marcha hasta acabar deteniéndose en la Calla Vinyassa. Allí se la identificó y se le hizo una prueba de alcoholemia, dando un resultado positivo de 1,35 mg/l, quintuplicando la tasa máxima permitida.
A continuación, se intentó seguir con las pruebas legales correspondientes, pero la mujer interrumpió constantemente el proceso, sin seguir las indicaciones del agente y sin soplar correctamente en el dispositivo, lo que acabó con la invalidación de la prueba.
Como consecuencia de estos hechos, se informó a la conductora de su condición de investigada por dos presuntos delitos contra la seguridad vial, uno por la negativa a someterse a las pruebas de detección de alcohol y otro por conducir bajo influencia de bebidas alcohólicas.
También fue advertida de comparecer ante la autoridad judicial cuando fuera requerida para ello. El vehículo fue inmovilizado y trasladado al depósito municipal de Sa Riera.