Paseando entre las diferentes paradas del mercado del Olivar, analizando cada uno de los productos expuestos, Flor Horno, nutricionista especialista en conducta alimentaria, se cita con mallorcadiario.com para ofrecer una perspectiva innovadora y flexible sobre cómo abordar la alimentación durante estas fechas tan señaladas.
Afincada en Palma, esta jóven argentina, destaca por promover, en redes sociales, un vínculo saludable entre la comida y el cuerpo, una nutrición flexible, con la que poder disfrutar de cada plato sin quedar marcados por el sentimiento de culpa o hinchazón.
Para Horno, la clave durante estas fechas no es “contar calorías” ni establecer “dietas estrictas y restrictivas” o “eliminar ciertos productos”, sino disfrutar de los alimentos desde una perspectiva consciente. “Las comidas navideñas no deberían ser motivo de estrés, sino un momento para conectar con los sabores, las texturas y el placer de compartir. Permitirnos disfrutar de lo que realmente queremos comer, sin culpa ni remordimientos. Esto es fundamental para evitar excesos posteriores” explica.
"El 95 por ciento de las dietas fracasan; no necesitamos nuevas restricciones, sino aprender a escuchar nuestro cuerpo"
Paseando entre verdulerías y fruterías, la nutricionista explica que el estrés asociado a la comida es lo que muchas veces genera los “famosos atracones”, una reacción al miedo a disfrutar libremente de los alimentos.
Enseñando algunos de los alimentos que a ella le suele gustar introducir en su alimentación diaria, Horno trata de desmontar algunos de los mitos en torno a las conocidas dietas previas y posteriores a estas fiestas, definiéndolas como poco efectivas y perjudiciales por su efecto rebote. “El 95 por ciento de las dietas fracasan; no necesitamos nuevas restricciones, sino aprender a escuchar nuestro cuerpo, equilibrar las comidas y movernos de forma habitual, no para compensar, sino para sentirnos bien", explica.
"Todos los alimentos tienen cabida en una dieta equilibrada, porque etiquetar como buenos o malos a ciertos productos solo genera restricciones innecesarias y culpabilidad"
Tomando un café en una de los bares del tradicional mercado de Palma, Flor Horno explica que llegó hace casi dos años a Palma, y que desde entonces promueve esta rama que invita a esta relación flexible con la alimentación. Entre sorbo y sorbo, explica que es importante dejar de lado las restricciones y centrarse en las personas y en su historia para ayudarlas a mantener una vida equilibrada y saludable. Por ello, la nutricionista aconseja “mantener una alimentación habitual antes y después de las celebraciones, sin extremos ni compensaciones”, tratando de buscar un equilibrio.
Flor Horno promueve la alimentación intuitiva, una filosofía que elimina las reglas rígidas y se centra en escuchar las necesidades del cuerpo. En este enfoque no hay alimentos prohibidos ni combinaciones erróneas, sino una invitación a equilibrar el consumo de alimentos que aporten tanto placer como nutrición. En palabras de Horno, “todos los alimentos tienen cabida en una dieta equilibrada, porque etiquetar como buenos o malos a ciertos productos solo genera restricciones innecesarias y culpabilidad”.
Durante la Navidad, Horno recomienda mantener la tradición en los platos principales, permitiendo disfrutar de las recetas familiares que nos traen recuerdos y emociones a la mente. Sin embargo, Horno avisa de la importancia de no abandonar el cuidado nutricional en las semanas posteriores, manteniendo el consumo de frutas, vegetales y alimentos equilibrados como parte de un estilo de vida constante.
"Si queremos que los niños consuman frutas y verduras, debemos predicar con el ejemplo"
Llegada a una frutería del mercado Horno se para y selecciona algunas de las frutas expuestas, explica que durante estas fiestas es importante introducir diferentes frutas y verduras en nuestra alimentación y en la de los más pequeños del hogar. “Si queremos que los niños consuman frutas y verduras, debemos predicar con el ejemplo. Ellos copian lo que ven y consumir estos productos durante estas fechas es la mejor manera si queremos que los pequeños también lo hagan”.
Otro de los detalles que no pasan desapercibidos durante estas fechas, es el consumo de alcohol. En este sentido la nutricionista llama a la moderación e invita a que la gente se pregunte “¿realmente me apetece otra copa o con esta ya es suficiente?”. No se trata de un enfoque en límites estrictos, son en preservar el bienestar y el disfrute sin llegar al malestar.
Durante este paseo por el mercado otro de los temas que aparece en la conversación con mallorcadiario.com son la influencia de comentarios inoportunos en estas celebraciones, “tenemos que evitar dar opiniones sobre la comida o el cuerpo de los demás durante las reuniones festivas con amigos y familiares. Los comentarios sobre el peso o la apariencia dañan profundamente y pueden generar mucho estrés, especialmente en personas que han atravesado trastornos alimentarios”.
"Las redes sociales pueden servir para educar sobre la importancia de mantener una relación saludable con la comida y el cuerpo"
Atravesando las puertas de salida del mercado, Horno comenta por último el uso positivo de las redes sociales para transmitir su idea. Plataformas que más allá del uso social, “pueden servir para educar sobre la importancia de mantener una relación saludable con la comida y el cuerpo”, animando a las personas a cuestionar los mensajes culturales y de las dietas que dominan el discurso social.
En definitiva, Flor Horno nos invita a vivir una Navidad diferente, libre de restricciones, enfocada en el disfrute consciente y con una mirada amable hacia nosotros mismos y los demás. Una filosofía que se extiende más allá de las fiestas, marcando un camino hacia un vínculo más saludable con la alimentación.