El arquero conocido en Rumanía como 'el héroe de Sevilla', por atajar los cuatro penaltis del Barça en la tanda de penales, tenía 65 años y murió esta madrugada en un hospital militar de Bucarest.
Según el diario rumano Gandul, Duckadam había sido hospitalizado el pasado miércoles. El exfutbolista se había sometido en los últimos años a varias intervenciones médicas, la más reciente una operación a corazón abierto en septiembre pasado.
Su estado de salud no fue bueno en las últimas dos décadas, con problemas en los brazos y en las rodillas, que obligaron al exdeportista, según la prensa local, a tomar una veintena de pastillas diarias.