Cabe recordar que el hombre, de 61 años de edad, resultó malherido después de que tres personas asaltaran su vivienda y le hirieran de gravedad antes de emprender la huida.
Por su parte, la Guardia Civil sigue con las investigaciones para tratar de dar con los presuntos agresores y mantiene el ajuste de cuentas como la principal hipótesis de la agresión.
Asimismo, se estudia si la agresión puede estar relacionada con que el hombre sea alguien a quien, en los últimos años, la Benemérita ha investigado como sospecho de la desaparición de cuatro personas.
La finca donde suecdieron los hechos fue objeto de un minucioso registro en diciembre de 2020 por parte de la Guardia Civil, que la peinó con excavadoras y perros rastreadores en busca del cuerpo del propietario desaparecido, aunque no encontró ninguna evidencia para inculpar al sospechoso, liberado sin cargos tras ser detenido.
Este hombre también había sido investigado en tres ocasiones anteriores en el marco de investigaciones sobre desapariciones en circunstancias similares de otras tantas personas en cuyas propiedades residía con permiso de los dueños.