El suceso tuvo lugar este lunes por la tarde, sobre las 18:30 horas, en una vivienda de la calle Sant Rafel, en Palma. Una mujer pedía auxilio a gritos a través de una ventana y rápidamente llegaron al lugar agentes de la Policía Local de Palma.
A su llegada, los agentes encontraron a un hombre rumano de 43 años que reconoció haber discutido con una mujer, que se trataba de su inquilina. La mujer, chilena de 61 años, trató de esconderse y pedir ayuda, cosa que consiguió con la llegada de la Policía.
La víctima les contó que había solicitado a su arrendador cambiar de habitación. Mientras efectuaba el traslado, el casero, en estado de embriaguez y de manera muy agresiva, le recriminó estar tardando mucho. También le reclamaba una supuesta deuda de 288 euros, que ella pudo demostrar que estaba pagada.
Estando ella en su habitación, el agresor entró sin su consentimiento y la zarandeó, agarrándola por los brazos y causándole lesiones leves. Gracias a la colaboración de otro inquilino, también de nacionalidad rumana, pudo sacarlo fuera y atracó la puerta. Dado que la reacción de su arrendador era cada vez más violenta, se asomó a la vía pública desde la ventana y pidió auxilio a gritos.
Durante todo ese tiempo estuvo sufriendo amenazas, que cesaron con la llegada de los agentes. Valorados los hechos, los policías comunicaron al autor su detención por los presuntos delitos de allanamiento de morada, amenazas, lesiones y coacciones.
Una vez trasladado el detenido a dependencias de la Policía Local, la División de Policía Judicial (DPJ) inició las correspondientes diligencias. Posteriormente, se dio traspaso del atestado y detenido a Policía Nacional para su seguimiento.