Un -9 (récord del campo) en la última ronda da el oro a Scottie Scheffler. Scheffler (USA) Oro, Fleetwood (GB) Plata y Matsuyama (JPN) Bronce este es el podium olímpico masculino de golf.
Jon Rahm ha sido quinto y David Puig ha acabado en la posición 40, ambos han realizado unos últimos nueve hoyos para olvidar. La cuarta y definitiva ronda no ha podido ser más espectacular para los aficionados al golf, aunque algo decepcionante para los españoles que hemos visto acariciar el oro a Jon Rahm en la primera parte del recorrido.
El de Barrika ha llegado al -20 (el oro olímpico ha estado en -19) y cuatro de ventaja en unos 10 primeros hoyos perfectos, la mejor versión de Jon en mucho tiempo, hemos visto el RahmBo killer e implacable previo a su paso al LIV Golf. Pero algo se ha truncado del 11 al 14, bogeys y doble bogeys que le han dejado k.o.
Hoyo 11, par 3 resuelto mediante 4 golpes. Y luego el 12, un par 4 culminado en 5 golpes. Y sólo un poco más tarde el par 5 del hoyo 14, con un letal doble bogey.
Mientras tanto los perseguidores tomaban posiciones. Fleetwood, Matsuyama, McIlroy e incluso el francés Víctor Pérez con una secuencia de ensueño - Le Golf National rugió como nunca - querían alguna de las perseas. McIlroy marró sus opciones al irse al agua en el 15 y anotar un doble bogey, Pérez no conseguía poner la guinda en el 18, el par le dejaba con un -16 que parecía insuficiente para tocar metal. Matsuyama iba consolidando el bronce, muy sólido en su juego. El oro y la plata estaban en manos de Scottie y el poeta triste.
Scheffler parecía casí descartado tras la tercera ronda. Cuatro golpes y tantos jugadores por delante se antojaban mucho. Pero para el nº 1 del mundo mucho es nada. Empezó la ronda encadenando tres birdies del 1 al 3 y remató la faena con seis birdies más en los últimos 9, cuatro consecutivos del 14 al 17. Dejaba un - 19 difícil de superar y más aún al marcarse un bogey en el 17 Fleetwood que le obligaba a birdie en el 18 para forzar un play off para el oro.
Scottie Scheffler es insaciable. Se ha cobrado un nuevo hito: ganar la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de París 2024 en una clase magistral de golf. Un golfista de leyenda pese a sus 28 años. Una leyenda engrandecida este año a base de éxitos de enorme prestigio, con récord de victorias y una superioridad insultante que le acreditan como el mejor jugador del mundo.
Tristes por el descalabro de Rahm y deseosos de que Carlota Ciganda y Azahara Muñoz nos den una alegría en la prueba femenina.