El cuarteto integrado por Hugo González, Carles Coll, Mario Mollá y Sergio de Celis, que concluyó quinto en su serie con un tiempo de 3:32.66 minutos, fue descalificado tras observar los jueces alguna irregularidad tras la revisión de las imágenes de vídeo.
Francia, liderada por Leon Marchand, ha marcado el mejor tiempo de las series (3:31.36) mientras que el combinado chino ha sido segundo (3:31.58) por delante de Estados Unidos (3:31,62). La final tendrá lugar este próximo domingo, a partir de las 19.10 horas.
Hugo González, pese a alcanzar dos finales en los Juegos de París, su mejor resultado en una cita olímpica, no se mostró satisfecho con su actuación en la capital francesa, donde, como reconoció, no pudo mostrar su auténtico nivel.
"A nivel de Juegos son los mejores que he hecho. Son dos finales, mientras que en Tokio fue una y en Río ninguna, pero no hemos nadado al nivel que queremos, ni al que realmente tenemos. No es nuestra mejor versión", señaló González.
La sexta plaza que el balear logró tanto en la final de los 100 espalda como en la de los 200 no cubre las expectativas con las que Hugo González llegaba a París tras proclamarse el pasado mes de febrero en Doha campeón del mundo del 200 y subcampeón del 100.
Pero el español, de 25 aos, no logró nadar nunca en los tiempos que firmó en la capital catarí, lo que le impidió meterse realmente de lleno en la lucha por las medallas en las dos finales que disputó en la piscina de La Défense.
"Quedarse escuchando críticas o lo que dice la gente desde el sofá no nos ayuda a mejorar, lo que nos ayuda a mejorar es analizar toda la estrategia, lo que hemos hecho todo el año y ver cómo podemos estar al nivel que queremos estar", indicó González.
La misma receta que el nadador balear a la hora de analizar el resultado del relevo de 4x100 estilos, en el que nadó la posta de espalda, y se quedo fuera de la final tras ser descalificado.
"La prueba ha acabado y no podemos quedarnos mirando qué ha salido mal, sino en qué podemos mejorar, porque el año que viene habrá un Mundial o un Europeo o lo que toque y hay que seguir y ver si nos podemos meter en la final", afirmó.
En ese este sentido, González se mostró optimista con el futuro del relevo de estilos español, ya que, como recalco, tiene "potencial" para lograr mejores resultados.
"El potencial está, que antes no lo teníamos. Simplemente hay que nadar en nuestra mejor versión el día que toca y no un mes antes o medio año antes", concluyó.
La descalificación del relevo de estilos no fue la única mala noticia para la delegación española, ya que el joven Carlos Garach, una de las grandes promesas de la natación nacional, no tuvo ni la más mínima opción de clasificarse para la final de los 1.500 libre con un tiempo de 15:20.84 minutos.