Una final que González, que ya fue sexto en los 100 espalda en la capital francesa, afrontará con la octava mejor marca de todos los participantes, tras concluir tercero en la primera semifinal con un tiempo de 1:56.52 minutos.
Registro que el balear, vigente campeón del mundo de la distancia, deberá mejorar notablemente en la final, que se disputará este jueves, si quiere discutir el triunfo al húngaro Hubert Kos, que se postula como el máximo favorito al oro tras firmar la mejor tiempo de las semifinales con un crono de 1:55.96 minutos.
Tras las semifinales, González, reconoció que "mañana habrá que pelear para nadar bastante más rápido". "Queremos más, queremos estar en 54", señaló en referencia a su récord de España, de 1.54,51, logrado hace poco más de un mes.
El objetivo es "lograr marca personal o estar en el mismo segundo (...) Ahora a descansar y recuperar". El mallorquín, que con su tiempo le tocará nadar en las calles 1 u 8, las laterales, recalcó que desde ellas "se puede ganar".
González avanzó que no es seguro que compita en la prueba de 200 estilo. "Depende del entrenador, tengo que hablar con él primero", indicó.