Tras recibir aviso de los hechos, dos agentes se trasladaron a la zona y acabaron localizando al equino tendido en el suelo del aparcamiento de un restaurante de la zona.
Se dio la casualidad de que uno de los agentes actuantes pertenecía a la Unidad Montada y tiene una amplia experiencia con este tipo de animales, por lo que desde un primer momento apuntó a que el animal padecía un cólico.
Los agentes, ayudaddos por la dotación de una UNOC, incorporaron al animal y tras lograr tranquilizarlo, lo retuvieron para evitar que huyera y provocara algún percance.
A través de la Sala del 092 se requirió la presencia de personal del Centre de Protecció d’Animals Domèstics (CEPAD), dependiente de la Fundació Natura Parc, que se hizo cargo del caballo.
Al día siguiente los agentes contactaron con dicho centro para conocer el estado del caballo y desde allí les confirmaron que el animal había sufrido un cólico y que se estabarecuperando favorablemente. Además, se confirmó que se había localizado al propietario para que pudiera hacerse cargo del animal.