SUCESOS Y TRIBUNALES

La terraza derrumbada del Medusa Beach Club era ilegal

(Foto: J. Fernández Ortega).

Informe de los técnicos

Marina Forteza | Martes 28 de mayo de 2024
Se confirman las sospechas sobre el Medusa Beach Club, cuya terraza se derrumbó cobrándose la vida de cuatro personas: la zona chill out, renovada este invierno, no tenía licencia ni de actividad ni de ocupación, y no hay registro de ninguna solicitud de obras.

Así se desprende del demoledor informe elaborado por los técnicos de Cort y los Bombers de Palma, que constata que se iniciaron las obras sin tener licencia. Sin embargo, el sótano que se utilizaba como discoteca y la primera planta sí tenían el permiso pertinente.

Los informes elaborados por diferentes áreas del Ayuntamiento de Palma, ya han sido remitidos a la Policía Nacional y al Ministerio Fiscal, quienes ahora tomarán las riendas del caso y procederán a actuar en consecuencia. Todo apunta a que se les impute por cuatro delitos de homicidio imprudente.

En 2013 se abrieron varios expedientes sancionadores al local, pero estos se referían a unos "forjados diferentes" al que colapsó el pasado jueves. Las obras se llevaron a cabo en ese misño año, reformandl la parte de arriba del forjado, a pesar de la solicitud de la actuación había caducado. Sin emabrgo, la parte que colapsó no fue remodelada.

A raíz de aquella obra se abrió un expediente sancionador.

Además, en 2023, el local no pasó la ITE (Inspección Técnica de Edificios) y desde entonces no se hizo nada por subsanar las deficiencias encontradas. La imprudencia acabó provocando una de las mayores tragedias de Mallorca en los últimos años, con cuatro fallecidos y 16 heridos. "Ojalá poder tener un funcionario en cada uno de los miles locales que hay en Palma", ha declarado Martínez, en respuesta a por qué si no había licencia de obras, no se controló que estas no se llevasen a cabo.

Asimismo, el alcalde de Palma, Jaime Martínez, ha avanzado que el consistorio se personará en la causa.

LAS CAUSAS

Tal y como se explicó en las primeras hipótesis, la terraza se desplomó debido a la sobrepeso de las obras: parte de la cubierta fue reformada en 2013, a excepción de la parte derrumbada, que se rellenó de capa de mortero, a lo que se le añade la sobrecarga: en el local había aproximadamente 21 personas, con una mesa de 12 comensales, cuya distribución habría provocado el punzamiento del forjado. Además, la antigüedad del edificio añade que la estructura no estaba preparada.

Sobre si el aforo se cumplía o no, el jefe de los Bomers de Palma, Edar García, ha sentenciado que no tenía licencia por lo que no hay cosntancai de cuántas personas pdía haber. "No debería haber habido nadie allí", ha lamentado.

YA SE HICIERON OBRAS ILEGALES EN 2013

Los informes constatan que en 2013 se remodeló el local de forma ilegal, a expcecpión de la terraza que se derrumbó, sobre la que se añadió dicha capa de mortero de nivelación sobre la cubierta ya existente, lo que habría provocado el sobrepeso al que se añadiría la sobrecarga por la afluencia de personas.

La cubierta había sido reconvertida como terraza sin licencia de actividad ni autorización para ser utilizada como tal. Los datos catastrales del inmueble, construido en 1972, únicamente reflejan la existencia de la planta baja, que dispone de uso comercial.

Así, la cubierta habría ido acumulando sucesivas reformas. Cort ha ratificado que en 2013 la propiedad hizo una solicitud de obras en la cubierta existente que se denegó, pero que los trabajos “se hicieron igualmente”.

Ante ello se abrieron diferentes expedientes de sanción, aunque ninguno referido a la zona del derrumbe. Asimismo, este invierno también se han hecho obras, pero según el jefe de Bomberos de Palma han sido un “lavado de cara del local”, añadiendo diferentes elementos en la terraza que habrían podrido añadir aún más sobrecarga.

INSPECCIONES ESTE VERANO

El alcalde no ha querido precisar si se van a incrementar las inspecciones, aunque ha asegurado que como estaba ya previsto, se irán realizando a lo largo de este verano, sobre todo en Cala Major, Playa de Palma y Paseo Marítimo, en coordinación con Consell y el Govern.

Martínez ha puesto en valor el trabajo de los técnicos y ha hecho un llamamiento a todos los propietarios: "Las leyes están para cumplirse, no se pueden llevar a cabo obras ilegales". Además, ha enfatizado la importancia de poner en marcha cuanto antes el proyecto de las zonas turísticas maduras y la necesidad de rehabilitar los barrios.

TEMAS RELACIONADOS:


Noticias relacionadas