Según la policía, el individuo -de nacionalidad española y 38 años de edad- comenzó a golpear de forma insistente la puerta del domicilio de una mujer y a proferir amenazas de muerte contra ella.
En un primer momento acudió en defensa uno de sus sobrinos pero este también fue amenazado y la discusión que se había iniciado derivó en una agresión a la mujer y con la llegada de varias patrullas policiales.
El agresor, al percatarse de la presencia policial huyó, pero al cabo de unos minutos regreso, siendo informado por los agentes que aún se hallaban en el lugar recabando información de que quedaba detenido, a lo que reaccionó con tal violencia que obligó a intervenir a seis de ellos para lograr reducirlo.
Lejos de calmarse, el detenido profirió amenazas de muerte contra todos los agentes actuantes y provocó cuantiosos daños en el vehículo policial durante su traslado, así como en el depósito municipal de detenidos.
La víctima de las amenazas presentó una denuncia ante la Policía Local. Al detenido se le imputaron los presuntos delitos de amenazas de muerte, lesiones, resistencia grave a los agentes de la autoridad y daños y fue puesto a dispposición judicial, quedando en libertad con cargos.