No me gusta la palabra puta, ya que se utiliza siempre de forma despectiva para insultar y vejar a una mujer. Por eso, la utilización del término es un ejemplo de machismo. Pero ahora lo es también de feminismo. Ese feminismo que utiliza el 8M para insultar a todos los hombres, incluidos los de su familia. Qué dirían si yo dijese que su padre, su hermano, su tío, su primo o su hijo son puteros. O putos. Cuando reflexiono sobre la España actual, me asombro de lo ingenuo y tonto que soy. Yo me eduqué en otro mundo. La mujer siempre era respetada, comprendida y ayudada. No porque fuese mujer, sino porque es persona. Diferenciar el sexo o género, para utilizarlo como arma política es de personas sin cultura ni humanidad. Es de machista y de feministas, las dos caras de la misma moneda. Ambas son despreciables y atentan contra la cultura de toda una sociedad. Si se justifican por el número de tantas mujeres asesinadas por sus parejas, yo les digo que lo que hay que hacer es aumentar las penas de prisión. En mi casa, desde siempre, hemos dicho que aquel hombre que mata a una mujer y luego se suicida, debería haberse suicidado antes y dejar en paz a la mujer. No apoyaría nunca la pena de muerte, pero no dejo de pensar en lo que yo le haría a un hombre que atentase contra alguna de mis nietas o contra mi nieto. Ahí sí que sé que el que entraría en la cárcel sería yo. Pero volviendo a la palabra puta. La mayoría de las personas que la utilizan y hablan de las putas, no tienen ni idea de lo que dicen. ¿Cuántas putas conocen? ¿Con cuántas putas han tenido contacto personal, no sexual? ¿Cuántos putos conocen? ¿Cuántas mujeres conocen que pagan a hombres por su compañía en la cama? ¿Qué saben de la prostitución y de las razones que impulsan a hombres y mujeres de todas las culturas a ejercer esa ¿profesión? Utilizar la palabra puta para designar a toda mujer que no hace lo que el macho quiere, es tan asqueroso como decir que todos los del PP y Vox son machistas y que todos los progresistas son feministas. Yo, que he conocido de todo en esta vida, les aseguro que hay más puteros y puteras de los que se puedan creer. Incluso hemos conocido a políticos que se gastaban el dinero público en burdeles de jóvenes imberbes. Ojo, de la derecha y de la izquierda. Tanta tontería y grito en la calle, mientras en la ciudad se destapa la prostitución obligada de 13 mujeres chinas. Estas feministas, que apoyan al PSOE porque pretenderá y ni lo conseguirá eliminar la prostitución en España, ¿saben cuantas empresas legales hay registradas de personas de compañía, es decir, de escorts, hombres y mujeres en Palma? Si la respuesta es que no, lo miren en la Red y verán qué hay más de 2 millones de referencias.
Y hablando de putas, putos, drogas y dinero público, les dejo este enlace: https://casos-aislados.com/tramas.php, en el cual encontrarán todos los casos de corrupción que han pasado por los tribunales con sentencia penal. Hay tantos, de tantos partidos políticos, empresas e incluso Casa Real, que me han entrado ganas de vomitar.