De la manera más cruel. Tal y como le sucedió con el RCD Mallorca en Mestalla o con el Valencia en San Siro, los penaltis han vuelto a ser esquivos para Héctor Cúper. Tras pasar la fase de grupos gracias a una victoria por la mínima sobre India que provocaron las lágrimas de su traductor y del periodista que lo entrevistaba al acabar el envite, Siria ha dicho adiós a la Copa de Asia.
Pasada la media hora, Irán se ha puesto en ventaja gracias a una pena máxima transformada por el delantero del Porto, Mehdi Taremi. También desde los once metros, el sirio Omar Khrbin ha logrado una diana que forzaba una prórroga que los iraníes han afrontado con diez al ser expulsado su goleador.
Sin goles durante el tiempo extra, el pase se ha decidido en los penaltis. Allí, el meta Alireza Beiranvand se ha convertido el gran héroe persa al detener un lanzamiento que ha valido la clasificación de los suyos a cuartos.