La Diada de Mallorca ha iniciado hoy su proceso de cambio desde el 31 de diciembre, fecha que fue instaurada en 2016 por los partidos del Pacte, hasta el 12 de diciembre, en que quedó fijada en 1997 bajo la presidencia de la extinta Unió Mallorquina. El Pleno del Consell ha aprobado inicialmente el cambio, tras lo que se abre un periodo de exposición pública que llevará a los primeros meses de 2024 el cambio real de la conmemoración.
Durante la presentación de la propuesta, el conseller de Presidencia, Antoni Fuster, ha subrayado que para impulsar la modificación han contado con una consulta a los 53 municipios de la isla, que obtuvo respuesta de 30 de ellos, positiva en 28 casos. Asimismo, ha apuntado que "la segunda consulta participativa" fue pedir opinión a tres expertos, que han emitido en los tres casos informes favorables a la opción del 12 de septiembre.
Fuster ha recordado asimismo que "en mayo de 1997, votaron a favor (de la Diada el 12 de septiembre) todos los partidos políticos: PSOE, PP, IU y UM, con la excepción del PSM". "El consenso se rompió en 2017 cuando los partidos de izquierda quisieron imponer su modelo y quitar protagonismo a Palma", ha señalado el conseller de Presidencia, para quien el equipo de gobierno ha presentado este jueves "una propuesta bien trabajada y bien fundamentada".
Desde Vox, el conseller David Gil ha señalado que la postura en contra de la oposición responde a sus "intentos interesados de insultar a Mallorca, nuestra historia y nuestra identidad, al servicio de un servicio secesionista simbolizado en la fecha del 31 de diciembre". Ha indicado que Més y PSOE quieren "destacar inventados aspectos culturales compartidos con Cataluña, que supone una visión sesgada de la historia mallorquina".
Esta posición ha sido frontalmente rechazada por PSIB y Més. Así, Javier de Juan, ha subrayado que el actual equipo de gobierno "hará servir su poder absoluto" para imponer una idea de Mallorca a la que ha calificado de "pobre y limitada". De Juan ha recordado que para situar la fecha en el 31 de diciembre, "en 2015 se creó una comisión para estudiar si era adecuado cambiar la fecha del 12 de septiembre". "Ustedes hablan de consenso pero no ha habido ni una comisión para tratar el tema, ni reuniones con los representantes de la mitad de la ciudadanía ni un intento por convencernos de la necesidad de cambiar la fecha", ha indicado el representante del PSIB, quien ha afeado "que no hayan querido oír ni a la UIB ni al resto de entidades afectadas por esta cuestión".
Por su parte, el portavoz de Més, Jaume Alzamora, ha asegurado que a la propuesta de cambiar la Diada al 12 de septiembre "le ha faltado rigor científico". "Viene motivado por tres informes técnicos que son tres simples artículos de opinión, dos de los cuales están en castellano: qué forma es esa de defender la identidad mallorquina". Por ello, ha asegurado que "como representante del Consell, hoy sentiré vergüenza por la falta de rigor, de objetividad, de apoyo y de debate público, algo muy distinto a lo que se hizo en 2016".
El portavoz de El PI, Antoni Salas, ha mantenido una postura más templada, atacando fundamentalmente "la forma" en que se ha realizado la propuesta por parte del equipo de gobierno y ha propuesto que se ponga en marcha una comisión de expertos, en la que deben participar la UIB y los plenos de los ayuntamientos, que decida qué fecha es mejor, si bien ha advertido que "la mayoría de la población no siente ninguna Diada como suya, ni la del 12 de septiembre ni la del 31 de diciembre". Ha justificado ese hecho en que "nunca ha habido unanimidad respecto a la celebración de la Diada y porque no es un día festivo".