, habilitó un dispositivo especial para controlar este tipo de vehículos, ha informado el Ayuntamiento de Palma.
Por otra parte, la Policía Local intervino el pasado sábado varios objetos de un puesto de venta ambulante situado en el centro histórico de la ciudad.
Entre el material falsificado requisado hay bolsos y riñoneras. La actuación se llevó a cabo en la Plaça del Rosari, donde fue denunciado un hombre de 44 años por ofrecer estos objetos a los viandantes.
Cabe recordar que el decreto municipal de regulación de usos de los vehículos de movilidad personal fue aprobado al inicio del actual mandato, en julio de 2019. Dicha norma prohíbe expresamente que los patinetes circulen por aceras, plazas, parques, jardines y otros espacios públicos destinados en exclusiva a los peatones.
Además, obliga a los vehículos de movilidad personal a llevar timbre, sistema de frenado, luces y elementos reflectantes homologados para que se puedan detectar a una distancia de 150 metros. Asimismo, establece que como mínimo hay que tener 15 años de edad para conducir uno de esos vehículos.
Los datos son muy preocupantes pues tan solo en el año 2020 fallecieron en España cuatro usuarios de patinetes eléctricos, 97 resultaron heridos requiriendo hospitalización y 1.097 sufrieron heridas aunque no tuvieron que ser hospitalizados.
En Palma, durante el 2022 se registraron 330 accidentes protagonizados con estos vehículos; el Ayuntamiento de la capital balear impuso en ese periodo un total de 2.315 multas a conductores de patinetes eléctricos -un 74,2 por ciento más que el año anterior- y el importe total de las sanciones por el mal uso de patinetes ascendió en Palma a 77.424 euros, un 67,6 por ciento más que en 2021.