La mamporrera del PSIB, Mercedes Garrido, ha abortado la posibilidad de que el prestigioso Psiquiatra Oriol Lafau pueda contribuir con su conocimiento y experiencia a mejorar las actuaciones en salud desde el Parlament de les Illes Balears.
Ha impedido con un golpe mortal que el artífice del Pacto Parlamentario por el Bienestar Emocional y la Salud Mental firmado por todo el espectro parlamentario pueda seguir dignificando la implantación de las políticas en salud mental en sede parlamentaria.
El padre del pacto que concilió el apoyo de todos los grupos parlamentarios por unanimidad, con una innovadora propuesta de transformación del modelo de atención a la salud mental centrado en las personas y en su formato de vida, transversal e interinstitucional, no ha podido superar la incontinencia verbal de una candidata del mismo grupo al que le habían invitado a participar. No ha podido sobrevivir a un golpe reprobable y desproporcionado.
Oriol, un médico de excepción, un valor seguro ha sido recuperado por la profesión. Podrá seguir desarrollando sus inquietudes desde la independencia. Sin las limitaciones ideológicas que imprime la disciplina de un partido que no es capaz de proteger a los independientes que se esfuerzan en mejorarlo, moderarlo y centrarlo. Sus pacientes lo agradecerán. Sus compañeros también.
El siguiente en la lista es Quim Torres. Ha quedado sobre la misma cabeza de la inquietante Garrido, ocupando el espacio destinado al bueno de Oriol. Ya puede extremar las precauciones y proteger su vida privada. La posibilidad de que la insolvente Garrido lo destruya es muy alta. Ha entrado en zona de peligro.
De hecho, que uno de los hombres de la máxima confianza de Armengol y de Gómez haya volado por los aires por sus declaraciones irreflexivas, cáusticas y fuera de toda moderación obliga a protegerse a los miembros de una candidatura caracterizaba precisamente por la incorporación de independientes. El riesgo asumido por Quim es muy alto. El suyo y el de la propia salud mental de Francina.
Los Díez Negritos, icónica obra de la gran Agatha Christie, transformada por corrección política en “Y no quedó ninguno” vuela sobre los desprotegidos independientes que venían a dignificar y dar nivel a una candidatura de perfil bajo después de dos legislaturas de mucho relato y de poca acción. Dos legislaturas en la que los gabinetes de prensa han sustituido a la acción política.
En este caso, a diferencia de la novela, no es difícil interpretar la autoría del golpe mortal. Queda por despejar el móvil y la motivación. Queda por dilucidar si la emboscada de Garrido, es fruto de la maldad, la estulticia o de la insolvencia. Ha saboteado los esfuerzos de Armengol en centrar un partido radicalizado por sus socios y en dignificar una candidatura deficitaria en capacidad de gestión, ausente de talento y entregada al populismo más rancio de la formación a la que representa, a la que ha golpeado en su línea de flotación, derribando a su mejor activo.
Nota. El término mamporrero se utiliza con el significado de golpe, coscorrón, puñetazo. No bajo la acepción de la que ayuda en la reproducción de los animales domésticos, especialmente los caballos, guiando el pene del semental a la vagina de la yegua. Ambas acepciones están aceptadas por el diccionario de la RAE de la lengua. Que quede dicho. Buen finde.