Sede de la final la Copa del Mundo en 1982, de la Eurocopa en 1964 y de varias finales de Champions League, el feudo merengue enmudeció en 2003 cuando los de Manzano lograron su mayor goleada a domicilio en Primera División (1-5). Meses más tarde, los blancos remontaron con un 3-0 el 2-1 encajado en la ida de la Supercopa de España y en 2007, alzaron el título de Liga tras superar los isleños en la última jornada.
A lo largo de la historia, el conjunto bermellón ha sido capaz de ganar en el coliseo blanco hasta en 7 ocasiones que repasamos a continuación.
El primer triunfo 'barralet' en el Bernabéu tuvo lugar ante el Castilla. En el minuto 7, Barrera recogió un rechazo de Solana para batir a Serna con un impresionante disparo con la zurda desde el borde del área que se coló por una de las escuadras. Pasada la hora de juego, el argentino firmó el segundo tras una internada de Higuera por la banda izquierda que dejó en evidencia a Pombo. El marcador pudo ser más severo, pero 'Paquete' y Armstrong marraron sendas ocasiones.
Siete días después de empatar en Palma ante el Eibar (1-1) en un encuentro en el que Maqueda acabó como portero, el RCD Mallorca visitó el Santiago Bernabéu para enfrentarse ante apenas 7.000 espectadores al por entonces segundo clasificado, el sorprendente Real Madrid B. El canterano madridista y nueva estrella mallorquinista, José Luis Morales, dejó el encuentro encarrilado con dos tantos en la primera mitad. En el minuto 80, Maqueda culminó una contra conducida por Copado batiendo a Contreras con un disparo raso y cruzado.
La primera victoria ante 'los mayores' fue entre semana, en concreto el miércoles 1 de noviembre de 2000, y con Luis Aragonés en el banco. En la segunda mitad, y con empate a cero, la ansiedad ya se había apoderado de los locales. Una situación que aprovechó Ibagaza culminando con una genial 'cuchara' una contra. Un auténtico golazo que dejo en evidencia a la zaga blanca y que además, enmudeció el abarrotado feudo madridista.
En el minuto 89, y ya con el Real Madrid totalmente volcado hacia la meta defendida por un seguro Leo Franco, el andaluz Carlos sacó a relucir su mejor virtud, la velocidad, para marcharse de su marcador y anotar el gol de la sentencia ante la incredulidad de los asistentes.
En un partido correspondiente a la jornada 32, los blancos salieron al césped con todas sus figuras. Entre ellas, sus tres Balones de Oro -Ronaldo, Zidane y Figo- además de otros espadas de primer nivel mundial como Roberto Carlos, Casillas o Fernando Hierro. Un once de gala en el que tan solo faltaba Raúl. En la primera mitad, 'O Fenomeno' avanzó a los locales, líderes en la tabla. Fue en el minuto 9 tras aprovechar un servicio de Mc Manaman, un fino centrocampista inglés que años más tarde contrajo matrimonio en La Seu de Palma. Una diana, la 300 del brasileño como profesional, que hizo temer caer por goleada.
Sin embargo, en una segunda parte inolvidable, los dirigidos por Gregorio Manzano -en aquellos momentos undécimos en la clasificación- fueron capaces de endosarle cinco goles al nombrado por la FIFA como mejor club del mundo en el siglo XX. Cuarenta y cinco minutos de fútbol total que enmudecieron a una afición que nunca antes había asistido a un repaso como aquel en tan corto espacio de tiempo.
En el minuto 48, el uruguayo Pandiani aprovechó un mal entendido de la zaga local para establecer el empate. Tres más tarde, una contra liderada por Samuel Eto'o acabó en un milimétrico servicio del camerunés culminado por Albert Riera. Inolvidable el gesto de rabia del manacorí en la celebración. Con los locales noqueados y la grada silbando, Casillas evitó el tanto del africano tras una brillante asistencia de Ibagaza. Sin embargo, poco pudo hacer el meta de Móstoles cuando en el 62, un Eto'o rodeado de adversarios se revolvió sobre sí mismo para dejar sentado a Roberto Carlos y anotar el gol de la noche. Una vez más, 'El León Indomable' de los barralets demostraba el error cometido por el conjunto de la capital al dejarle marchar.
A falta de poco más de veinte minutos para la conclusión, Roberto Carlos desvió al fondo de su portería un disparo de Riera. Era el 1-4. Y para completar 'la manita', el gol de Carlos. El andaluz -autor de la diana del ascenso en Vallecas y del primer tanto en la historia de Son Moix- cerró la cuenta en el tiempo de descuento después de sustituir a un Eto'o que se marchó entre aplausos. Por cierto, era el primer contacto del sevillano con el cuero.
Los isleños, por su parte, esperaban en la retaguardia con el objetivo de culminar alguna contra. Y así sucedió, cuando en el minuto 82 Ibagaza superó a Dudek con una sutil vaselina. Cinco años después, volvíamos a estar entre los ocho mejores equipo de la Copa. Por cierto, el a la postre Pichichi Dani Güiza no disputó ni un solo minuto de la eliminatoria ante los blancos.
Siete días después de derrotar al ya campeón FC Barcelona en Son Moix (2-1), el RCD Mallorca se desplazó hasta la capital para medirse al Real Madrid en el Santiago Bernabéu. Era la penúltima jornada de un campeonato en el que los nuestros cumplieron con el objetivo de la permanencia mientras los blancos se tuvieron que conformar con la segunda plaza.
Y si el gol del jugador cedido por el Atlético fue bello, qué decir del firmado por Keita. Otro golazo, en esta ocasión con un fuerte disparo que sorprendió por el palo corto a Casillas ante unos contemplativos Javi García y Ramos