Año 1.991, un grupo vallisoletano llamado Celtas Cortos nos cantaba “Cuéntame un cuento y verás que contento me voy a la cama y tengo lindos sueños” 30 años después en el laboratorio de la Moncloa, Iván Redondo “gurú” oficial del Presidente Sánchez decía “lo encontré”, es más sencillo de lo que pensaba Sr. Presidente, vamos a contar cuentos a los españoles, si se cumplen ganamos y sino se cumplen le echamos la culpa a la Oposición, a Europa, a Trump, al Papa, al cambio climático o a todos juntos.
El primer cuento “factoría Moncloa” llegó a finales del 2019 “no dormiría por las noches con Podemos en el Gobierno” la verdad es que casi me emociono y me echo a llorar, Sánchez había encontrado la luz, pero pronto nos daríamos cuenta de que sólo era el principio de más cuentos, como el “no dejaremos a nadie atrás” “la nueva normalidad” “saldremos más fuertes” “España si puede” “este virus lo paramos todos” “hemos vencido al virus y controlado la pandemia” cabe recordar que este último, dicho en el verano anterior ha costado muchas miles de vidas. Pero la producción de cuentos seguía y apostaba más fuerte con su último hit “al final del verano tendremos vacunadas al 70% de la población”.
Dicen que un Mundo sin políticos que mientan es imposible y les voy a decir una cosa, llega un momento que si me mienten, pero al final llegan los resultados, les doy un beso de tornillo, pero el gran problema es que mienten y no llegan los resultados para la economía, ni para las vacunas, tan siquiera vemos un plan con cierta lógica y no me hartaré de decir que “NO ESTÁN HACIENDO TODO LO QUE HACE FALTA” para evitar tanto desastre.
Para terminar, les voy a contar mi propio cuento que empieza así “los ciudadanos de España, fueron llamados a las urnas y fueron en masa como nunca se había visto, trabajadores, autónomos, pequeños empresarios, funcionarios, clases bajas, medias, altas y con sus votos echaron a todos los cuenta cuentos que había en este País, eso pasó también en otros paises de Europa y del Mundo, porque la gente se había cansado de oír tantos cuentos”.
Este cuento se puede convertir en realidad, está en manos de todos, cuando llegue el momento, usted podrá decir tranquilamente, métanse sus cuentos por dónde les quepa.