OPINIÓN

Juan Ramón Amores, un político honesto

Opinión mallorcadiario.com

Juan Antonio Tormo | Lunes 25 de enero de 2021

Juan Ramon, padece ELA, tiene dependencia severa (Grado II) y un 68% de discapacidad, en el 2015 le dieron 3 años de vida, es evidente que el COVID podría acabar con su vida, pero no se quiere administrar la vacuna hasta que le llamen de su Centro de SALUD, porque le haya llegado su turno. Seguro que no es un hecho aislado y hay más alcaldes y cargos públicos que harán los mismo, porque hay muchos sinvergüenzas que se aprovechan y se vacunan sin tocarles, dando excusas peregrinas. Alguno le falta decir que se tropezó y cayó encima de una jeringuilla que contenía la vacuna y por supuesto no han dimitido, hasta que se ha denunciado su miserable comportamiento.

En España hay más de 8.000 Ayuntamientos, con sus respectivos alcaldes, si aplicamos un tanto por ciento para los negados en cualquier profesión, que cómo mínimo podría ser entre un 10 a un 20% nos salen de 800 a 1.600 Alcaldes que nunca debieron llegar a serlo, porque además les pagamos entre todos sus sueldos.

Esto lo podemos extrapolar a jueces, médicos, enfermeras, periodistas, policías, abogados, empresarios y toda la humanidad, pero reconozcamos que en algunas profesiones mencionadas da miedo decirlo o es políticamente incorrecto mencionarlo. El problema se acentúa con los alcaldes, altos cargos o funcionarios porque nos tendrían que servir y no se parte de nuestros problemas, al resto por lo menos ni les pagamos sueldos públicos y además cuando lo hacen mal sus jefes no suelen ser tan compasivos como en la función pública.

En estos momentos de desespero generalizado, cuando vemos que muchísimos políticos no aciertan con las medidas o no saben tomar las adecuadas, no deberíamos caer en el error de demonizar a todo el colectivo, sí que tenemos todo el derecho a criticarlos que es otra cosa, pedir su dimisión o cese, algunos también aspiramos a reformar la Ley Electoral para evitar en la medida de lo posible que entre lo peorcito de la Sociedad en política.

En cualquier caso, no me voy a alargar más, porque todo el protagonismo de este humilde artículo lo tiene el ALCALDE con MAYÚSCULAS, Sr. AMORES, que nos ha recordado a todos que hay buena gente dispuesta a hacer cosas por los demás, por eso cuando votemos tenemos que exigir, que los que aspiren a cargos políticos acrediten experiencia, conocimientos, integridad en la gestión acometida y valores, tiene que ser sometidos a un examen ANTES de las elecciones, no vale ya la propaganda, nos sobra, necesitamos ahora más que nunca a gente como el Alcalde Juan Ramón Amores, que demuestran su honestidad a la vez que también les exigimos eficiencia, pero sin lo primero será difícil que se cumpla lo segundo.

“La honestidad es el primer capítulo en el libro de la sabiduría. Dejemos que sea nuestro esfuerzo merecer el carácter de una nación justa” Thomas Jefferson.


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