Estas restricciones por la crisis sanitaria de la covid-19, que podrían prolongarse en el tiempo, afectarán al deporte base pero también a los equipos punteros de la isla, como el Atlético Baleares y la UD Poblense, que militan en la categoría de Segunda B del fútbol español; el Palma Futsal, conjunto que compite en la Primera División de fútbol sala, y el Palmer Alma Mediterránea, encuadrado en la Liga LEB de baloncesto. También repercutirá en los partidos de fútbol de la Tercera División balear.
La consellera de Afers Socials i Esports, Fina Santiago, ha explicado a las federaciones más afectadas, al Colegio Oficial de Licenciados en Educación Física (COLEF) y a la Asociación de Empresarios de Instalaciones Deportivas de Baleares, las nuevas restricciones sanitarias que el Govern balear aprobará el lunes.
El mantenimiento de Mallorca en fase de riesgo 4 supone, además, que permanecerán suspendidas las competiciones de deporte federado de equipo y de contacto de las diferentes categorías autonómicas que estaban previstas en la isla o en las que participe un equipo mallorquín.
Mientras se prolongue este nivel, sólo se pueden realizar dos entrenamientos como máximo a la semana en los deportes de equipo y de contacto. En la práctica, en el caso de Mallorca, en el caso del deporte de equipo y de contacto, sólo se podrán realizar competiciones estatales, pero sin público.
La segunda gran medida acordada consiste en suspender la presencia de espectadores en las instalaciones deportivas convencionales y centros deportivos para la realización de actividades físicas que no sean al aire libre, excepto para la práctica de la actividad deportiva federada organizada.
En este caso, las actuaciones se regirán por la normativa y los protocolos específicos de cada federación, afectando, entre otros equipamientos, a gimnasios, pabellones y piscinas cubiertas.