Los hechos se remontan al verano pasado. Distintas máquinas expendedoras repartidas por Sa Cabaneta amanecían rotas y sin género en su interior. Una vez reparadas, a los tres días volvían a aparecer destrozadas y vacías.
Jornadas más tarde, el objetivo se trasladó al Pont d'Inca. Los ahora detenidos causaron importantes daños en otras máquinas expendedoras de la localidad aunque en esta ocasión no lograron hacerse con la comida y bebida de su interior.
La Guardia Civil del puesto del Pont d´Inca inició una laboriosa investigación que ha llevado a la plena identificación de los autores.
En total, se ha detenido a diez jóvenes -todos ellos de 16 y 17 años- por delitos de robo con fuerza y daños. Posteriormente, han sido puestos a disposición de Fiscalía de Menores.