El grupo resultante gestionaría un inventario de cerca de 100 hoteles y más de 21.000 habitaciones, la mayoría en categoría 4 y 5 estrellas, distribuidos en más de 15 países.
De esta manera, la nueva compañía contaría con una sólida implantación no sólo en los principales destinos vacacionales de España, República Dominicana o México, sino también en Cuba, Portugal, Marruecos o Colombia, entre otros.
El proceso está siendo dirigido por las consultoras Ernst & Young y PwC.