En una nota informativa, la APB ha señalado que viene detectando que en la zona de la Avenida Gabriel Roca se está generalizando el hábito de mantener abiertas las terrazas hasta altas horas de la madrugada. Esta circunstancia se ha intensificado desde que se ha permitido la posibilidad de ampliar las ocupaciones de las terrazas en uno de los carriles de circulación de vehículos, con el fin de apoyar la reactivación económica de los negocios de restauración y facilitar también el distanciamiento social para aminorar cualquier tipo de riesgo de transmisión del virus.
Además, son numerosas las quejas recibidas por parte de vecinos que protestan por la generación de ruido a altas horas de la noche, con el consiguiente perjuicio para el descanso nocturno de estos ciudadanos. En la carta, la APB recuerda que su obligación es hacer cumplir la Ordenanza Municipal de Ocupación de la Vía Pública del Ayuntamiento de Palma, según rige el Plan Especial del puerto.
Tras esta advertencia, la Policía Portuaria, con la colaboración de la Policía Local, intensificará presencialmente los controles de los horarios de cierre de esta zona.