Desde que se dictó su cierre, los profesionales de los Centros de Día han realizado un seguimiento de los casos tanto telefónicamente como con visitas presenciales de forma que la información a los usuarios no se ha interrumpido durante la pandemia. Estos usuarios también han contado con el apoyo del Servicio de Ayuda Domiciliaria (SAD). Además, durante estas semanas, las Trabajadoras Sociales de los distintos centros se han puesto en contacto con las familias para conocer sus necesidades.
La prioridad de los usuarios y su acceso al servicio viene dado por criterios técnicos y valorando su necesidad social. Además, se tiene en cuenta el grado de discapacidad, empezando por el grado III, personas con demencias, la vulnerabilidad social y la posibilidad de conciliación familiar.
El total de personas atendidas en esta primera semana será de 33 personas en cada uno de los centros de Son Sardina, Son Dureta y Coll d'en Rabassa y 6 en el centro de s'Estel de la Plaça del Mercat.
Actualmente hay 110 usuarios activos en los centros. Un total de 56 familias han solicitado la reincorporación de sus mayores. El próximo lunes día 15 se ampliará el servicio hasta el 50 por ciento de la ocupación. A medida que la consellería autorice un aumento de ocupación, se irá avisando a los usuarios para poder acceder a los centros.
“Valoramos muy positivamente el reinicio de los servicios para dar atención a las personas mayores dependientes que durante estos meses han tenido que permanecer en sus domicilios. Tenemos que ir recuperando con prudencia la atención de los usuarios con más necesidades”, ha dicho el teniente de alcalde de Cultura y Bienestar Social, Antoni Noguera.