Biel Company ha hecho especial hincapié, además, en que el decreto pisa "el patrimonio de los payeses y pequeños propietarios", a los que ha calificado de "gente sencilla y humilde". También ha asegurado que perjudicará la actividad de pequeñas empresas en los pueblos, y en concreto ha citado los casos de albañiles, fontaneros, electricistas, carpinteros, herreros o jardineros, que son, siguiendo su argumentación, "los que se dedican a hacer estas obras y a mantenerlas".
Para el presidente del PP, el Govern "confunde protección con prohibición", y esto generará más abandonos del territorio. También ha defendido que "proteger significa gestionar", y que el texto del decreto, en vez de aumentar la conservación y la preservación del territorio, provoca el abandono de muchas fincas rústicas y, por tanto, el deterioro del paisaje y del entorno.
Según ha explicado el portavoz popular en las islas, los primeros ediles de la formación han coincidido en que el decreto implica una "moratoria de facto" de cualquier actuación en suelo rústico.
Al mismo tiempo, Company ha pedido "decisiones claras y valientes" para salir de la crisis económica, y ha asegurado que la presidenta del Ejecutivo, Francina Armengol, ha "copiado" algunas medidas del PP para impulsar el tejido productivo.
El líder del PP considera que "para contentar a los socios de gobierno y a entidades afines", el Govern aprueba otro decreto que, en su opinión, "frenará mucha actividad económica en todos los municipios". Al mismo tiempo, Company ha lamentado que Armengol muestre tics de "gobiernos poco democráticos" y traté de imponer sus criterios "a golpe de decreto".