De hecho, el ministro de Sanidad, Salvador Illa, dijo al respecto este pasado viernes que usar la mascarilla era “altamente recomendable” y el sábado, fue el propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, quien aconsejó su uso “incluso cuando no sea obligado”.
Y, sin embargo, el uso de mascarilla en espacios públicos sigue sin ser obligatorio; una obligatoriedad que queda reducida a la utilización de transporte público y al ámbito laboral.
Con el gradual inicio de las salidas a la calle, el principal temor es que se produzca un repunte en el número de contagios y por esa razón, el Gobierno se planteó imponer el uso obligatorio de mascarillas aunque descartó, al menos de momento, la medida: “Hay argumentos en pro y en contra”, dijo Illa, que añadió: “Ahora estamos en fase de evaluar si procede, o no, su uso obligatorio en determinadas situaciones”.
Pero los problemas prácticos para adoptar una medida como el uso obligatorio son varios y de distinta naturaleza: primero, habría que determinar qué tipo de mascarilla sería realmente óptimo o cumpliría, al menos, los requisitos mínimos sanitarios exigibles; también habría que garantizar un suministro continúo a la población y a precios accesibles y se deberían articular sistemas de recogida o eliminación de esas mascarillas para intentar evitar que acaben abandonadas o tiradas en cualquier lado, con el peligro que ello implicaría.
Así que, al menos de momento, utilizar mascarillas en espacios público sigue quedando en manos del ciudadano.
Y sobre eso preguntamos esta semana en mallorcadiario.com quisimos conocer su opinión al respecto y por ello preguntamos: “¿Usa mascarilla cada vez que usa la calle?” y la respuesta mayoritaria de los encuestados ha sido “No” con un 50,3 por cien, frente al 49,7 por cien restante que asegura que “Sí” lo hace.