Agentes de la Policía Nacional han detenido en la madrugada del jueves a un hombre de 58 años de edad como presunto autor de un delito de amenazas graves, en el que habría usado unas tijeras y un destornillador.
Sobre las 22 horas del miércoles, se recibió una llamada en la Policía para que acudieran a una finca situada en el barrio de Arxiduc de Palma en la que se denunciaban agresiones entre varias personas.
Los agentes se entrevistaron con las personas que 'okupaban' el piso, que les informaron que el agresor había llegado muy alterado porque le habían robado su teléfono móvil y había agredido a dos personas, al parecer a una de ellas con unas tijeras, y que además lo habían visto esgrimiendo un destornillador.
Los policías entraron en el edificio y pudieron observar por el hueco de la escalera al supuesto agresor, que se hallaba en el tercer piso y esgrimía un destornillador. El detenido se negó a entregarse y reto a los agentes a subir a buscarlo.
El hombre se dirigió a la azotea donde los agentes lo encontraron colgado de la cornisa, agarrado con las manos y con los pies apoyados en un pequeño saliente de la pared. Los agentes lo agarraron de los brazos para evitar su caída.
El detenido se resistió a los agentes, quiso soltarse y llegó a quedarse colgado. Agarró a uno de los agentes de la muñeca y tiró de él tirando fuertemente por lo que otros policías tuvieron que ayudarle para que lo tirase al vacío.
Cuando lo rescataron, localizaron dentro de su bandolera unas tijeras y proceden finalmente a su detención.