Los hábitos tras el levantamiento del estado de alarma puede cambiar sensiblemente. Bien sea por miedo al contagio o por las restricciones económicas que puedan sufrirse, un amplio número de encuestados no tiene planificado realizar viajes en un periodo corto de tiempo.
Uno de los mayores temores es que cuando pase la pandemia del coronavirus y se abran puertos y aeropuertos, algunos ciudadanos se retraigan a la hora de viajar.
Así, a la pregunta de que si tiene intención de viajar cuando acabe el confinamiento, un 62,4 por ciento afirma que no lo tiene previsto, mientras que el restante 37,6 por ciento asegura que tiene intención de viajar.