Pasear al perro, ni más ni menos, que ocho kilómetros. La Policía Local ha denunciado a un vecino del municipio por excederse en las salidas con los canes. En este caso, los agentes verificaron que el hombre vivía a ocho kilómetros de punto en el que fue localizado y éste alegó que necesitaba salir de casa porque "llevaba mucho tiempo confinado".
Otro individuo fue denunciado por pasearse con ticket de compra pero sin compra. Los agentes le habían visto tres veces en la calle y las tres veces con el papel. A la tercera, levantaron acta.
También llama la atención la necesidad imperiosa de tabaco de noche. Un hombre ha sido denunciado tras ir a comprar un paquete en taxi, a las nueve de la noche y a 6 kilómetros de su domicilio. La Policía recuerda que se debe comprar el máximo posible para evitar el goteo de salidas.
Otro de las situaciones más inverosímiles: la de una persona interceptada en s'Estanyol, a las 20 horas, para "ir a comprar el pan"... Viviendo, además, en Palma.
Circular con el coche para que el motor ruede "y no esté mucho tiempo parado", las comidas con amigos -dos días distintos, en lugares y con personas distintas- y las salidas "para dar de comer a los animales" sin poder acreditar que tienen animales, son otros tres supuestos que se han dado en el municipio y que han acabado en acta.
Esto forma parte de las 791 actas levantadas hasta hoy.