Nueva jornada trágica en Italia, que este viernes ha sumado otras 627 fallecimientos a su luctuoso balance de muertes por coronavirus. De esta manera, el número de óbitos causados por esta enfermedad en el país transalpino supera ya la cifra de 4.000, mientras que los contagios se elevan a 45.700 después de que en estas últimas horas se hayan diagnosticado otros 4.670 casos.
Así las cosas, la actualización de datos de la progresión del COVID-19 en Italia refiere 2.655 pacientes que están siendo atendidos en las unidades de cuidados intensivos; otros 16.020 permanecen hospitalizados; y 19.185 reciben tratamiento domiciliario.
La única buena noticia es que a lo largo de este viernes 689 pacientes que en su momento sufrieron coronavirus han recibido ya el alta médica. Con este nuevo registro en la mano, son ya 5.129 las personas que han logrado superar con éxito la infección.
Por zonas geográficas, Lombardía continúa siendo la región italiana más castigada por la pandemia, con 22.264 casos. Solo este viernes, han debido contabilizarse 2.380 nuevos diagnósticos. En esta área del país, 2.549 personas han muerto a causa del coronavirus, de las que 381 han fallecido en estas últimas horas. En estos momentos, y desde el pasado jueves, Italia es el país con más víctimas mortales por COVID-19 en todo el mundo, estadística en la que ha superado a China, pese a que fue en la nación asiática donde emergió el foco originario.
La grave situación en Lombardía ha obligado al primer ministro, Giuseppe Conte, a cambiar su postura inicial y autorizar la presencia del Ejército en las calles de esta región con el objetivo de que se garantice el cumplimiento de las medidas excepcionales sobre confinamiento domiciliario. Esta era una petición que Conte ha ido esquivando durante los últimos días, a pesar de la insistencia de las autoridades regionales lombardas, y que, finalmente, no ha tenido más remedio que atender ante la progresión imparable de la enfermedad en este territorio del Norte de Italia.
En concreto, el Gobierno desplegará 114 soldados en Lombardía, una cifra que el presidente de la región de Lombardía, Attilio Fontana, ha calificado de "claramente insuficiente". Estos militares se sumarán a partir de este sábado al destacamento que ya se hallaba en la zona, formado por otros 34 soldados.
Otras medidas adoptadas por el Ejecutivo de Conte y que atañen también a Lombardía tienen que ver con el cierre de todos los parques y jardines públicos durante las 24 horas, la prohibición de acceder a las segundas residencias, y la obligación de realizar deporte en solitario cuando éste se efectúe al aire libre.
De hecho, las personas que realicen ejercicio en las vías públicas deberán mantener al menos un metro de distancia respecto a otros viandantes, y, además, contarán con un tiempo limitado para practicar deporte. Esta misma restricción del tiempo se aplicará en el caso de los ciudadanos que salgan a la calle para pasear a sus perros.
Pese a ello, el presidente lombardo insiste en que son necesarias por parte del Gobierno italiano medidas preventivas de mayor calado para frenar las insostenibles cifras sobre incidencia del coronavirus en esta zona.