"Un perro policía no es un perro normal, de ahí que no pueda acabar en manos de cualquiera", afirma Rosa Chamorro, presidenta y portavoz de la ONG.
En el caso de los tres perros policía de Palma, sus años de entrenamiento y servicio en seguridad ciudadana y detección de drogas los convierten en animales muy especiales que requieren de unos conocimientos y hábitos muy concretos para evitar problemas tanto al animal como a las personas que lo adopten.
"Estos animales cuentan con unas habilidades especiales trabajadas durante años. Cuando la institución a la que pertenecen les da de baja, su principal objetivo debe ser encontrar a la persona o personas adecuadas que sean capaces de dar salida a su energía y capacidades para preservar el bienestar del animal y evitar incidentes con personas", indica Chamorro.
Cabe recordar que el pastor aléman, el pastor belga y el labrador que han acabado en la perrera de Son Reus para cumplir el correspondiente trámite de desafección -ya que, recuerda Cort, son "bienes municipales"-, esperan una salida a su situación. Según voluntarios del centro municipal, ésta podría llegar en los próximos días y de la mano de profesionales, "no de familias comunes que van a Son Reus a adoptar un perro".
Por su parte, desde Héroes de 4 Patas aseguran a mallorcadiario.com que la ONG está en contacto con el Ayuntamiento para dar la "mejor salida posible a estos animales" y si no hay cambio de guión "acabarán en manos adecuadas".