La Federación Empresarial Hotelera de Mallorca, la Asociación de Cadenas Hoteleras (ACH) y las patronales de las zonas afectadas han manifestado en un comunicado conjunto que comparten el objetivo final del decreto ley aprobado este viernes por el Govern para erradicar los comportamientos incívicos y los abusos de alcohol "por el perjuicio que generan tanto en los destinos afectados como a nivel de imagen".
Si embargo y a falta de conocer el contenido íntegro del decreto ley aprobado por el Consell de Govern, las patronales hoteleras han hecho especial hincapié en que el se respete los contratos firmados por los hoteles con turoperadores y clientes directos hasta la fecha de su entrada en vigor para permitirles cumplir los compromisos adquiridos y garantizar la seguridad jurídica.
El comunicadio subraya que la regulación de la venta de alcohol en establecimientos hoteleros y de restauración con precio global se limitará a tres bebidas por persona en los servicios de comida y cena, y el resto de consumos de bebidas alcohólicas deberá ser a precio unitario, en establecimientos ubicados en Playa de Palma, Magaluf y West End de Ibiza.
Asimismo, consideran que hay aspectos de la comercialización que "deberán revisarse en profundidad porque habrá mucha casuística para estudiar y resolver". Señalan además que en las zonas concretadas se verán afectados por las prohibiciones que introduce el decreto ley establecimientos hoteleros que no trabajan con el perfil de cliente que se persigue cambiar y que ocasiona los indeseables comportamientos incívicos.
María Frontera ha añadido que “el sector hotelero ha invertido muchísimos recursos económicos para transformar estas zonas turísticas y por lo tanto está muy comprometido y ha sido impulsor de los primeros pasos de esta transformación".
Por todo ello entiende como "imprescindible para que se dé cumplimiento a este ambicioso decreto ley y se produzcan resultados efectivos, contar con una buena planificación de las campañas de inspección y que se dote de los recursos humanos y medios suficientes".
El sector hotelero ha insistido en la necesidad de reclamar inversión pública en la mejora de estos destinos turísticos, "tanto con la financiación del Estado que se comprometió a aportar la ministra Reyes Maroto como de la propia administración autonómica que cuenta con recursos del Impuesto de Turismos Sostenible, cuyo uso para este fin está más que justificado así como los propios ayuntamientos.”
En cuanto a la vigencia de 5 años del decreto, Frontera cree que podría suspenderse antes si se cumplen los objetivos si hay un esfuerzo colectivo, se trabaja con planificación, con la adecuada dotación de medios, inversión y un buen seguimiento de las actuaciones y resultados.
Las patronales han manifestado el interés de los hoteleros de participar en los órganos de seguimiento y en definir los aspectos en los que debe centrarse.
El presidente de la ACH, Gabriel Llovera, reclama además que se vigile "que estos comportamientos se erradiquen y que no se traspasen a otras zonas”.
Las patronales hoteleras han manifestado al Govern Balear la importancia de explicar bien el alcance, aplicación y objetivos de esta norma a los mercados emisores, turoperadores y medios de comunicación, para evitar "una comunicación incorrecta que tenga efectos contrarios a los perseguidos", ha advertido Frontera, que ha pedido "un plan de comunicación amplio, riguroso y efectivo, acompañado de un refuerzo de las campañas de promoción de promoción que pongan en valor todos los productos turísticos" de las islas.
Respecto a lo que marca el decreto ley para el conjunto de las Islas Baleares, sobre la obligación de comunicación de la prohibición de realizar prácticas peligrosas y que pongan en riesgo la integridad física de las personas, Frontera lo considera "perfectamente razonable" y recuerda que en Magaluf "ya hace tiempo que se expulsa a los clientes que realizan estas prácticas". "Nadie quiere que se produzcan estos actos”, ha añadido.
Los hoteleros han recalcado que "el foco del problema no se da en los establecimientos hoteleros sino en ciertos locales que con su oferta comercial incentivan la ingesta masiva de alcohol" por lo que celebran la prohibición del llamado "pub crawling" y otras prácticas similares.
"Queremos un turista de calidad, de segmentos diversos y un turismo que practique un ocio saludable, no olvidemos que somos un destino de vacaciones y nuestros visitantes vienen a divertirse", ha dicho Frontera.