El Govern ha suspendido la autorización de nuevos salones de juego durante los próximos dos años. Se trata de una medida transitoria mientras el Ejecutivo autonómico define y pone en marcha un plan de racionalización de dicha oferta dado el notable y preocupante aumento de la misma. En palabras del vicepresidente del Govern, Juan Pedro Yllanes, "Baleares no tiene que convertirse en unas Vegas 'low cost' del Mediterráneo".
Ilustrando esta realidad con cifras, Baleares cuenta con 148 salones de juego, cuatro bingos, tres casinos y un local específico de apuestas además de 4.200 máquinas tragaperras, con lo que la comunidad recauda 34 millones en impuestos. Además, hay en trámite cinco solicitudes para la apertura de nuevos locales de juego.
Una tendencia ascendente que ha activado todas las alarmas dados los graves problemas psicológicos y económicos que dichos establecimientos están generando entre adolescentes, personas de escasos recursos y poliadictos. Algunas autoridades hablan incluso de problema de salud pública, por lo que la medida resulta del todo acertada. Las Administraciones no pueden ni deben dar un solo paso atrás en la lucha contra las adicciones, y el juego es una de las más extendidas e históricamente más silenciadas.
No obstante, dentro del futuro plan cabría discernir entre los efectos de cada subcategoría ya que no es lo mismo un casino que una casa de apuestas. Los primeros representan una oferta muy limitada y controlada, desestacionalizan la economía y generan multitud de puestos de trabajo mientras que los segundos están regidos de facto por unas normas mucho más laxas y son los que verdaderamente han proliferado en los últimos años. Tanto, que el número de menores que acceden y apuestan no para de crecer.
Además, para que el plan del Govern sea del todo efectivo convendría ampliar la estrategia a internet ya que las apuestas online representan una de las grandes amenazas por su facilidad para colarse en el campo de mira de cualquiera a través del móvil, el dispositivo por excelencia de los más jóvenes.